Sería muy pretensioso y arriesgado hacer un artículo en el que debamos decirle cuanto es lo mínimo para invertir, puesto que estaríamos rompiendo la lógica de la inversión y además no estaríamos siendo rigurosos dado que son varios los factores que condicionan tal decisión.
Sin embargo, si suele ser común que los inversores iniciados o que tienen intención de hacerlo en el futuro se puedan preguntar cuál podría ser un capital optimo para empezar a invertir en bolsa en definitiva en los mercados financieros. Por tanto vamos a intentar describir unas pautas que ayuden a un lector a tomar la propia decisión de inversión y así confeccionar su propia cartera.
Primero de todo es importante hacer la diferenciación propia de las personas, ya sea por la situación en la que nos encontremos y por otro lado nuestra propia aversión al riesgo y a la perdida que medirá nuestra tolerancia y gestión del binomio riesgo-rentabilidad.
Respecto a nuestra propia situación es básico hacer un ejercicio en forma de triangulo en el que en un lado representemos nuestros gastos habituales (por ejemplo: el pago de la hipoteca) y previstos (por ejemplo: la renovación del seguro del coche), y por otro lado nuestra capacidad de ahorro mensual realista (sin comprometer nuestro día a día) y nuestros objetivos en su respectivo horizonte temporal (Por ejemplo: un viaje a realizar dentro de dos años), este ejercicio nos ayudara muy bien a definir nuestro horizonte y capacidad real de inversión de forma segura (sin poner en riesgo nuestros puntos vitales)
Por otro lado, tal y como ya expresaba Daniel Kahneman en su Teoría de las perspectivas que le hizo ganar el Nobel de Economía en 2002, la aversión al riesgo está en el dominio de las ganancias y la búsqueda del riesgo está en el dominio de las pérdidas, y su influencia a nivel emocional en el comportamiento de cualquier inversor:

El punto de partida nace del concepto de la aversión al riesgo y a la perdida, ya que es sin duda el concepto fundamental para entender los comportamientos en las inversiones financieras y más concretamente en este caso en las operaciones bursátiles. Estos conceptos expresan la resistencia casi unánime a cortar las perdidas y la impaciencia para tomar los beneficios. Este sesgo psicológico es uno de los responsables de gran parte de los desengaños de los inversores.
En un próximo articulo hablaremos más en profundidad de la Teoría de las perspectivas y del papel fundamental que aplica en la denominada economía conductual o neuroeconomia, estamos seguros que no dejara al lector indiferente, pero mientas llega es vital tener este punto muy bien definido para evaluar donde nos posicionamos respecto al riesgo asumido por el beneficio esperado, debemos evitar cualquier posible sesgo en este sentido.
A partir de aquí hay tres aspectos del día a día, que pueden fácilmente afectar nuestra inversión y que conviene saber antes de iniciarnos en ella:
- Más dinero no equivale por definición a mayor rentabilidad
Es común que los inversores que se inician en los mercados financieros piensen en términos de rentabilidad en ganancia, pero la realidad es que es más correcto pensar en términos de rentabilidad porcentual.
Para poner un ejemplo real, imagina que compras una acción a 1€, dicha acción al cabo de un mes asciende a 2€, puede parecer que la ganancia de 1€ por acción no es mucho, pero en términos de rentabilidad estaremos hablando de un 100%, medir la rentabilidad en términos porcentuales nos ayudara a ser mas reflexivos y a la vez objetivos sobre nuestra actuación en las diferentes inversiones que realicemos.
- A tener en cuenta la afectación de comisiones y costes de servicio
Una inversión puede quedar mermada en gran parte por el desconocimiento de las comisiones y/o los diferentes costes de servicios (suscripciones, reembolsos, comisiones de gestión,….), son muy comunes y a la vez en su justa medida obvias por la relación win-win por el servicio contratado o gestionado sobre una inversión concreta en el mercado financiero, pero es importante conocerlas y tenerlas siempre presentes como parte del resultado positivo o negativo de nuestras inversiones.
- A tener en cuenta el Market Timing y el Asset Allocation
Es crucial la diversificación de nuestra cartera para disminuir el riesgo y a la vez facilitar el cumplimiento de nuestros objetivos, asimismo juega un papel importante el Market Timing, acertar en el mejor momento para contratar un determinado instrumento financiero y no cerrar una determinada posición por una afectación emocional que nos pueda reportar rápidamente una perdida, constituyen dos factores súper importantes para alcanzar nuestros propios objetivos. Tan importante es constituir una cartera bien diversificada en el que si es verdad afirmar que mas capital nos puede ayudar a una mayor diversificación, con el no caer en cerrar una posición en un fondo de inversión rápidamente solo porque un mes no ha sido bueno en ese instrumento en particular.
Como habrá podido comprobar el lector, no se trata de poner un determinado capital disponible encima de la mesa y listo, sino que es un proceso bastante más reflexivo y analítico en el que aspectos que podían parecer muy banales o incluso algo irrelevantes, no es solo que no lo son sino que constituyen el punto 0 de inicio de inversión en los mercados financieros y a la vez lo dotan de seguridad y confianza en que el inversor esta en el camino correcto, con una buena formación, expertise y acompañamiento le permitirán sin duda alcanzar sus metas de forma muy exitosa.